Nubes Icosaédricas

Dodecaedro tallado según simetría icosaédrica, con curvas basadas en el número áureo.

Mármol de Carrara, 11 cm diámetro

Vista desde su cara

A la vez que se la explora visualmente entre las manos, surge una agradable sensación al tacto, que percibe todo este movimiento y sinuosidad envolvente, y a la vez desenvolvente. La superficie del poliedro no está pulimentada sino que está satinada, es decir que tiene un aspecto mate, y que al tacto permite percibir la suave granulosidad del material, acentuando su percepción.

La vista sólo puede abarcar aquello que ve. En un poliedro hay muchos puntos de vista, los cuales no pueden ser vistos todos simultáneamente. Es aquí en donde el tacto proporciona una mayor percepción, pues con las manos se puede recorrer toda su superficie simultáneamente, y hacer una lectura más abarcativa, completa y sin duda agradable.

 

Vista desde el vértice
Vista desde la arista

 

Aquellos que me conocen saben que no hago las cosas sin motivo, es decir que siempre intento dar un mensaje, y entonces me preguntan qué significado tienen estas esferas poliédricas, qué mensaje encierran.

El mensaje de estas obras es virtual, es decir que no hay un mensaje del tipo inteligible en el sentido de una interpretación explicable mediante palabras, una explicación meramente intelectual; sino que busca transmitir una capacidad de percepción, y que es la percepción tridimensional, el sentir la tridimensionalidad de una forma armónica, compleja y envolvente. Por tanto el mensaje es virtual en tanto que busca estimular una virtud perceptiva expandida. Su exploración desafía a formarse una imagen integral que combine todos estos niveles perceptivos (visual, táctil e inteligible) y la gente aprecia asomarse, al menos por un momento, a esta percepción multidimensional.

 

Estrellas Dodecaédricas y Nubes Icosaédricas
han sido exhibidas en EdeA Galería de Arte, Capital Federal, Argentina,
durante el mes de febrero de 2005 con mención honorífica.

 

Etapas de la Obra

Comienzo el trazado de las curvas áureas sobre un dodecaedro de mármol de Carrara.
Aquí estoy tallando el dodecaedro, con fresas diamantadas

Aquí puede apreciarse el trabajo a medio camino, con algunas partes talladas y otras no. Nótese el contraste entre ambos estados, y su fuerza expresiva emergente.

He decidido mostrar algunas de estas etapas, pues hay quienes me han preguntado si son de plástico... o hechas por molde, de tan precisos los trazos...

Para que quede claro:
"Son bien de piedra"